Neme Rico fue sin duda una de los primeros skaters de este país, hoy en día sigue dándole fuerte al slalom. Además durante su vida ha practicado un montón de deportes.
“Alrededor del año 1967 solía jugar con el resto de niños del barrio de Amara Viejo de San Sebastián a bajar con nuestras goitiberas derrapando por la cuesta de San Roque y asustando a más de un transeúnte. Fue en esa época cuando me dí cuenta que esto de deslizarme en sus distintas modalidades me gustaba y que, posiblemente, me perseguiría durante toda mi vida. Y así ha sido.
Recuerdo también como a esa edad mi padre me preparaba en el taller unos patinetes con ruedas de rodamientos y mango de madera, tipo scooter y que además eran desmontables. Como os podéis imaginar eran parecidos a los actuales sólo en el placer que nos proporcionaba el ir sorteando obstáculos y con ellos comenzamos a correr algunas carreras que se organizaban en otros barrios. Algunos años más tarde llegó a nuestras manos un patín sin mango y poco más tarde comenzamos a ir a Hendaia a comprar revistas de skate.
En esa época, Rene y yo comenzamos a fabricar nuestros propios patinetes. Algunos de ellos los guardo todavía. Éramos Neme&Rene y fuimos perfeccionando nuestras creaciones haciendo cantidad de patinetes para nuestros amigos, cosa que hoy día sigo haciendo. Para ello utilizábamos el taller de mi padre para hacer las estructuras y el taller de serigrafía del padre de Rene para lo que podíamos considerar chapa y pintura. Era un momento en el que conseguir ejes y ruedas no era fácil y nos buscábamos la vida como podíamos. No teníamos problemas para hacer rampas, saltos, … porque en aquella época todo Donosti estaba en obras y no era nada difícil conseguir material.
Fueron pasando los años disfrutando de las goitiberas, de los patinetes y de alguna que otra bicicleta, así como de las primeras motos, lo que me llevó con 16 años a correr algunas careras de motocross, de velocidad y de trial .
Con algo menos de 18 años tuve un grave accidente en una carrera de motocross en la Playa de la Concha. Estando en el suelo mi preocupación era que la licencia con la que corría estaba falsificada porque todavía no tenía la edad para competir.
A mediados de los años 70 comenzamos a relacionarnos con los hermanos Tovar muy conocidos por ser de los primeros skaters y surfistas de Donosti. Fueron años en los que todos fuimos aprendiendo juntos ya que casi nada se sabía y como he dicho anteriormente había que pasar la frontera para poder tener algo de información.
No recuerdo bien donde fue, pero en alguna prueba conocimos a los hermanos Sánchez (SANCHESKI) quienes nos ofrecieron la posibilidad de entrar en la fábrica y poder entrenar y probar el material que estaban haciendo. Esto era el sueño para unos flipados como nosotros y fue un momento que no olvidaremos ya que nos proporcionó la posibilidad de conocer materiales que no estaban a nuestro alcance como los ejes de aluminio o las ruedas de Uretano. Poco después se formó el equipo SANCHESKI con el objetivo de participar en las pocas pruebas que se organizaban y realizar exhibiciones para promocionar el material que iban sacando.
Durante estos años no pocas veces nos acercábamos al Skatepark Erromardie de San Juan de Luz. En aquel momento fue el primer skatepark de Europa. Éramos muy pocos los que desde este lado de la frontera osábamos invadir un territorio y una actividad que parecía destinada a ser practicada solamente por ellos.
En el 76 me tocó ir a la mili a La Coruña. En aquel tiempo contaba con una furgo, «La Savina», compañera inseparable de todo tipo de aventuras. Recuerdo que llené la furgo de todo el material de que disponía ( tablas de surf, patinetes, etc.) y allí me planté, con la suerte de que el primer día entablé relación con un grupo de surfistas ‘nativos’ que me invitaron a su casa. Todo el tiempo que duró la mili estuve viviendo unas veces en La Savina y otras en su casa. También recuerdo que me enseñaron unos lugares increíbles para la práctica del surf y que estaban haciendo un Pub que más tarde se llamaría O’Patacon y les estuve echando una mano en todo lo que pude. También les ayude a construir un sarcófago para fabricar el Foam y hacer tablas completas de surf Rufo’s. ¡No se como lo hago pero me meto en todos los saraos! ¡Como podéis ver, en la Mili también se la lié a los militares pintándoles el camión de colores y con gorra!
Durante mi estancia ejercí como quien dice de comercial, enseñando los skates en algunas tiendas de deportes y a surfistas, ya que en aquella época en Galicia sí había una comunidad amplia de gente que practicaba surf pero no había llegado lo de deslizarse sobre ruedas.
Siempre he combinado esta actividad con otros deportes como las travesías en moto, ski, triatlon, btt y carreras a pie de todo tipo y condición. Lo que no olvido nunca es llevar un Longskate en la furgo para en cualquier momento… Disfrutar de una bajadita.
Estos últimos años estoy saliendo uno o dos días a la semana para patinar. Alguna vez viene Iciar, de Sancheski, a carvear, ya que le viene muy bien para el surf.
Últimamente suelo coincidir en algunas quedadas de slalom con gente algo más joven que yo sin llegar a entender el que me digan ‘el Jurásico que progresa peligrosamente’. También hay que puntualizar que esto lo dicen desde el afecto y el cariño.”
Estupenda historia que se une al origen del skate en la España de los 70 y que corroborar que en los diferentes lugares de la península había mucha gente que se entusiasmaba por un Monopatín. Enhorabuena Neme por seguir ahí y un fuerte abrazo de un «Jurásico» más.
Neme es muy modesto, pero realmente es un fiera, una MAKINA de matar. Que tengan cuidado los txabalines!
Y eso sin hablar del departamento técnico de diseño de nuevos skates con agresivos e innovadores diseños que el mismo dirige, bueno dirige, desarrolla y produce.
Super interesantes todas estas historias.
Yo vivia en la casa que esta detrás de la primera foto del cuarter y os veía subir y bajar, estabas con Santi, Xabi y ya tenia el veneno del boarding metido en las venas.